lunes, 13 de enero de 2014

Las mujeres son secretistas por naturaleza, y les gusta practicar el secreto por su cuenta. Arthur Conan Doyle.

Y os preguntaréis que dice ésta de las mujeres, de los secretos, y demás. Bueno deciros que tengo un secreto muy bien guardado y que pocas personas saben. Cada vez lo van sabiendo unas pocas más. Y no es que esté embarazada, je, je. Poco a poco os lo iré desvelando, pero habrá que esperar un poquito para que os lo desvele del todo. Creo que os gustará y supongo que me apoyaréis. Lo siento, tendréis que esperar, espero que me entendáis.
Por cierto, ¿sabéis quién era Arthur Conan Doyle?. Supongo que sí, pero para el que no lo sepa, deciros que nació en Edimburgo, Reino Unido, en 1859. Fue un médico y escritor escocés, creador del célebre detective de ficción Sherlock Holmes. Su obra incluye relatos de ciencia ficción, novela histórica, teatro y poesía. Algo curioso a tener en cuenta de este autor, es que estudió medicina en la Universidad de Edimburgo y que mientras estudiaba se dedicaba a escribir artículos sobre medicina, y alguna historia corta que luego se publicaría. Mientras trabajaba como médico, y siempre que no estuviese atendiendo a ningún paciente se dedicaba a escribir. En 1891, marcha a Londres para ejercer de oftalmólogo. Parece ser que no tuvo mucha aceptación y ningún paciente entró en su clínica, así que el tiempo vacío, lo dedicaba a escribir. En este tiempo fue cuando escribió las aventuras del personaje que le haría inmortal, Sherlock Holmes.
El personaje de Sherlock Holmes, era un personaje que según Doyle estaba gastando su mente, y quiso matarlo en varias ocasiones. Por fín y pese a las críticas e incluso a las amenazas, Doyle acabó con Sherlock Homes en su libro "El problema final". El público británico tomó tan mal este final que Doyle dio a su personaje, que tras diez años de resistirse, Doyle hizo reaparecer a Holmes en una historia titulada "La casa vacía".
Además de su novela literaria, Doyle fue nombrado, en 1902, Caballero del Imperio Británico, otorgándole el tratamiento de Sir.
Murió en 1930 a la edad de 71 años de un ataque al corazón.

Curioso, ¿verdad? y es que me gusta mucho la literatura inglesa y saber la vida y misterios que rodeaban a estos grandes artistas.
Cambiando de tema, ayer para desayunar hice unos Goffres Belgas, mi marido y mi hijo los han devorado. Muy buenos según parece. Hace unas semanas compré en el Lidl, un aparato tres en uno, es goffrera, sandwichera y tiene también plancha, para hacer hamburguesas o algún pincho.La verdad es que el primer día que la estrené, precisamente con unos goffres, me salieron fatal, no sé si porque estaba la masa un poco líquida y se me iba saliendo por todos lados o porque no la dominaba todavía, la máquina, quiero decir.
Ahora parece que le he cogido el tranquillo y ayer hice una nueva masa para goffres y ¡ala, a la goffrera!. Bien, bastante bien, aunque es una técnica que todavía no domino, pero con la práctica y haciendo muchos goffres, saldrán, ya lo creo que saldrán.
Os dejo las fotos haber que os parecen. Un besito y hasta la próxima.












Les he dado a las fotos un toque Vintage, no sé qué tal me han quedado. Espero que os guste la entrada de hoy y mañana más. Muchos besos.





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